jueves, febrero 6, 2025

Investigadora BUAP realiza estudio sobre parásitos en los cacomixtles

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Con el objetivo de prever riesgos de zoonosis y proteger la salud pública, un equipo de expertos del Instituto de Ciencias de la Universidad Autónoma de Puebla (ICUAP) realiza un estudio sobre la presencia de parásitos gastrointestinales en los cacomixtles (Bassariscus astutus), una especie de mamífero que habita las cercanías del Ecocampus Valsequillo de la BUAP.

Aunque los cacomixtles son animales inofensivos que no representan un peligro directo para los habitantes de la zona, la investigación busca identificar los parásitos que podrían afectar su salud, mediante la recolección y análisis de sus heces. El estudio tiene como fin prever si estos parásitos podrían transmitirse a los humanos y a otros animales domésticos.

Según la doctora Roberta Marques, líder de la investigación, este trabajo es uno de los primeros esfuerzos en la región para conocer la diversidad de endoparásitos en los cacomixtles, especialmente en el estado de Puebla. Marques, experta en la predicción de la distribución geográfica de patógenos, vectores y hospederos de importancia para la salud pública, resaltó que los cacomixtles, debido a su proximidad a asentamientos humanos, su dieta omnívora y su capacidad de dispersión, representan un posible riesgo sanitario, especialmente cuando sus excrementos quedan expuestos al aire libre, contaminando suelo y agua.

La investigación también destaca la falta de registros sobre las poblaciones de cacomixtles en el Ecocampus Valsequillo y sus alrededores, como Africam Safari y las colonias cercanas a Ciudad Universitaria. El avance de la urbanización y la construcción de fraccionamientos está reduciendo los hábitats naturales de estos animales, lo que aumenta la posibilidad de interacción con los humanos y, por ende, la transmisión de parásitos.

El cacomixtle es un mamífero omnívoro que pertenece a la familia Procyonidae, la misma que los mapaches. Se caracteriza por su pelaje castaño en la parte superior y su vientre blanco, así como por su cola anillada. Aunque es un animal nocturno y solitario, su cercanía a áreas habitadas aumenta las posibilidades de contacto con personas.

En cuanto a los resultados preliminares, el estudio revela que más de la mitad de las muestras fecales recolectadas de los cacomixtles en la zona del Ecocampus Valsequillo resultaron positivas para parásitos gastrointestinales. Entre los parásitos identificados se encuentran especies de protozoarios como Entamoeba histolytica, que puede infectar a los humanos a través de agua o alimentos contaminados. También se encontraron parásitos como Balantidium coli, que afecta tanto a humanos como a otros mamíferos, y larvas de nemátodos del género Strongyloides, que pueden infectar a las personas a través de la piel al entrar en contacto con el suelo.

La doctora Marques advirtió que todos los parásitos identificados en los cacomixtles son de potencial zoonótico, lo que representa un riesgo para la salud pública. Aunque la interacción directa entre estos mamíferos y las personas es poco común, sus excrementos, al estar expuestos al aire libre, pueden contaminar el medio ambiente, propagando los parásitos.

El estudio también tiene como objetivo sensibilizar a la población para evitar la convivencia cercana con estos mamíferos, así como para mantener limpias las zonas en las que habitan. Marques enfatizó que no se debe responsabilizar a los animales silvestres por las infecciones zoonóticas, sino al contacto directo de los humanos con ellos. Por ello, recomendó no alimentar ni mantener a estos animales en áreas residenciales y, en cambio, preservar sus hábitats naturales.

Este trabajo de investigación no solo permite identificar los parásitos que afectan a los cacomixtles, sino también orienta sobre las medidas preventivas necesarias para evitar los riesgos sanitarios que podrían derivarse de su presencia en áreas cercanas a la población humana.

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